Descripción
Mario Vargas Llosa
Travesuras de la Niña Mala
Punto de Lectura
Páginas: 432
Formato: 190 X 125 X 22
Subtítulo:
Peso: 0.5 kgs.
ISBN: 987-5781-63-0
Ricardo ve cumplido, a una edad muy temprana, el sueño que en su Lima natal alimentó desde que tenía uso de razón: vivir en París. Pero el rencuentro con un amor de adolescencia lo cambiará todo. La joven, inconformista, aventurera, pragmática e inquieta, lo arrastrará fuera del pequeño mundo de sus ambiciones. Testigos de épocas convulsas y florecientes en ciudades como Londres, París, Tokio o Madrid, que aquí son mucho más que escenarios, ambos personajes verán sus vidas entrelazarse sin llegar a coincidir del todo. Sin embargo, esta danza de encuentros y desencuentros hará crecer la intensidad del relato página a página hasta propiciar una verdadera fusión del lector con el universo emocional de los protagonistas. Creando una admirable tensión entre lo cómico y lo trágico, Mario Vargas Llosa juega en Travesuras de la niña mala (2006) con la realidad y la ficción para liberar una historia en la que el amor se nos muestra indefinible, dueño de mil caras, como la niña mala. Pasión y distancia, azar y destino, dolor y disfrute... ¿Cuál es el verdadero rostro del amor? La crítica ha dicho... «Una novela de amor de hoy, de erotismo, con encuentros, separaciones, sufrimientos, engaños, entrega, y también mucha verdad, y en la que Vargas Llosa, a modo de entomólogo, analiza minuciosamente la condición humana, como su gran admirado Flaubert en La educación sentimental, obra que se cita en la novela, entre otras muchas referencias literarias a las que alude el autor. Y es que la idea de novela para Vargas Llosa es "la experiencia totalizadora de la condición humana".» El País «La niña mala recuerda a los amorosos de Sabines: buscan la felicidad sin nunca encontrarla, pues encontrarla equivaldría a perderla sin remedio. Muy recomendable esta novela, en apariencia modesta, pero que en realidad rasca con saña exquisita en nuestros más íntimos deseos y frustraciones domésticas.» Javier Munguía, Revista de Letras